Detrás de iniciativas de innovación y proyectos de sostenibilidad en toda Europa, hay un instrumento financiero que ha sido esencial para reducir desigualdades y fomentar el crecimiento inteligente: los Fondos FEDER transformando Europa. Estos fondos, parte de la política de cohesión de la Unión Europea, canalizan miles de millones de euros cada año para fortalecer la competitividad de las regiones y apoyar la transición verde y digital.
Activos desde 1975, y con una dotación superior a los 200.000 millones de euros, los Fondos FEDER están alineados con los retos estratégicos de Europa: innovación, digitalización, economía baja en carbono y resiliencia territorial.
Un instrumento clave de la política de cohesión
El Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) es uno de los principales instrumentos financieros de la UE para reducir las disparidades entre regiones. Su objetivo es apoyar el desarrollo económico y social de las zonas menos favorecidas, fomentando un crecimiento equilibrado en toda la Unión Europea.
Se integra dentro de la política de cohesión, que representa aproximadamente un tercio del presupuesto comunitario, y está diseñado para impulsar la convergencia entre regiones, mejorar la competitividad y fomentar la cooperación territorial.
¿Qué tipos de proyectos financia?
Los Fondos FEDER se enfocan en cinco prioridades clave para el periodo 2021–2027:
- Una Europa más inteligente (I+D, digitalización, transformación industrial).
- Más verde (energía limpia, eficiencia energética, adaptación al cambio climático).
- Más conectada (movilidad y conectividad regional).
- Más social (empleo, inclusión social, educación y salud).
- Más cercana a la ciudadanía (desarrollo urbano sostenible y local).
Los proyectos financiados van desde infraestructuras digitales o redes de transporte sostenible, hasta soluciones de economía circular, espacios colaborativos de innovación o centros tecnológicos.
¿Cómo se gestionan y quién puede acceder?
Los Fondos FEDER se aplican de forma descentralizada a través de programas operativos nacionales o regionales. Esto permite que cada país o comunidad autónoma defina prioridades adaptadas a su territorio.
Pueden beneficiarse de estas ayudas tanto entidades públicas (administraciones, universidades, centros de investigación) como privadas (empresas, especialmente pymes), así como asociaciones sin ánimo de lucro que desarrollen proyectos alineados con los objetivos del fondo.
Presupuesto y alcance territorial
Para el periodo 2021–2027, cuenta con más de 200.000 millones de euros en toda la UE. España es uno de los países con mayor asignación, y las comunidades autónomas gestionan una parte significativa de estos recursos a través de programas regionales cofinanciados, con una aportación europea que puede llegar hasta el 85% del coste del proyecto en regiones menos desarrolladas.
Este modelo garantiza un efecto multiplicador: cada euro europeo se combina con financiación nacional o regional, generando inversiones sostenibles a medio y largo plazo.
Transición digital y verde
En línea con los objetivos del Pacto Verde Europeo, los Fondos FEDER transformando Europa, han reforzado su orientación hacia la sostenibilidad y la digitalización. En esta etapa, al menos un 30% del presupuesto debe destinarse a acciones relacionadas con el clima y un mínimo del 20% a innovación y digitalización.
Este enfoque permite apoyar a las regiones en su transformación estructural, promoviendo un desarrollo más resiliente, justo y alineado con las metas de neutralidad climática de la UE para 2050.